Ay, ese empeño en negar el pasado como dirigente de Izquierda Anticapitalista y engañar a la gente, a los españoles. Y si no mira la biografía con la que se presentaba a las elecciones internas de Podemos.
Miguel Urbán
Contestar a qué se dedica uno parece muchas veces la presentación de un curriculum ante una entrevista de trabajo. Y para PODEMOS, al contrario que para la casta que está saqueando el país, la política es todo lo contrario a un trabajo destinado a intereses particulares: para nosotros y nosotras la política es la herramienta más importante que tiene el pueblo.
He trabajado en ONG´S y actualmente soy gestor cultural de la Librería Cooperativa la Marabunta. Empecé militando en el movimiento estudiantil, sobre el que he escrito varios libros y artículos, participé en el movimiento alterglobalizador, contra la guerra y por supuesto, en el 15M, movimiento con el que en mi opinión, PODEMOS tiene un hilo de continuidad evidente. Creo que estas experiencias hacen que sienta PODEMOS como un espacio natural, donde diferentes sensibilidades de los movimientos sociales y la ciudadanía pueden unirse para construir algo nuevo y diferente. De hecho, considero que las movilizaciones de los últimos años son las que han permitido que, en este momento, estemos cerca de propiciar un cambio político que ponga la democracia y los intereses de la mayoría en el centro de las instituciones.
Cuando lanzamos PODEMOS lo teníamos claro: necesitamos un instrumento que la ciudadanía sienta como propio, donde todo el descontento se pueda convertir en autoorganización y fuerza popular. ¿Cómo no arriesgar, como no implicarnos hasta el fondo en algo tan ilusionante, en un espacio de todos y para todas? Queríamos provocar un gran desorden, pero para empezar construir una alternativa ciudadana al régimen de la miseria, al régimen de los que sólo piensan en si mismos y empobrecen al 99% de la población ¿Por qué lo que surge con el esfuerzo de todos entre todos tiene que estar al servicio de unos pocos? ¿Por qué la política sólo sirve a los de siempre e ignora a quienes generamos riqueza colectivamente con nuestro trabajo?
PODEMOS es una oportunidad para darle la vuelta a las cosas. Una herramienta para que la ciudadanía tenga todo el poder. Y es que la democracia la debemos construir entre todos y todas. El bipartidismo del PP-PSOE es un tapón que PODEMOS puede descorchar: ¡Seamos las burbujas que los hagan saltar por los aires!
En la Comunidad de Madrid la ola de ilusión que ha generado PODEMOS es enorme. He sido testigo de ello todos estos meses asistiendo y participando activamente en la creación de Círculos y en los numerosos actos en los que he podido intervenir. Creo firmemente que PODEMOS es el motor del cambio en Madrid. Un cambio que es urgente y necesario frente a tantos años de corrupción y recorte de derechos. El tiempo del PP en la Comunidad de Madrid está agotado. Su forma de gobierno ha sido el de la mafia, pero si seguimos empujando, pronto formará parte del pasado. Para hacer posible este cambio, para ganar Madrid y recuperar la democracia, me presento a Secretario General de la Comunidad de Madrid de Podemos. Un reto mayúsculo al que me presento tras haber sido elegido, de forma abierta y transparente, dentro de la candidatura de “Podemos Ganar Madrid”. Presentamos un equipo preparado para desterrar las políticas privatizadoras y abrir un tiempo de democracia y derechos en nuestra Comunidad. Un equipo con gente ligada a los problemas de la gente, a las movilizaciones que estos años han despertado a la sociedad madrileña. Personas con un perfil técnico, social y personal de primer nivel. Un equipo, en definitiva, que haga temblar a los partidos del Régimen y que ayude a seguir construyendo un Podemos para el empoderamiento ciudadano. Un equipo para ganar Madrid y ganar la democracia.
Esta es la historia de la mayor manipulación política en la historia reciente de España. Una historia que comienza con el informe Transforma España, sigue con el 15M y acaba en Podemos. Una pinza de facto entre quienes buscan fragmentar el voto de la izquierda para conseguir la victoria del PP y quienes pretenden importar el "socialismo del siglo XXI" tras haber colaborado estrechamente con países como Venezuela, Bolivia y Ecuador. Ambos extremos ponen en peligro nuestro futuro.